El Fondo Monetario Internacional dijo el viernes que el dólar se encuentra sobrevalorado entre un 10 y un 20 por ciento respecto de los fundamentos económicos de Estados Unidos a corto plazo, y que el euro, el yen y el yuan cotizaban mayormente en línea con los mercados.

En un reporte anual que evaluó la cotización de monedas y los déficits de las principales economías del mundo, el FMI también dijo que el peso mexicano se encontraría subvalorado entre un 5 y un 15 por ciento en caso de que no se concreten los riesgos proteccionistas derivados principalmente de las políticas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

El Fondo advirtió además de que los déficits de cuenta corriente se están concentrando más en ciertas economías avanzadas como Estados Unidos, al tiempo que Alemania y China siguen arrojando superavits de manera consistente.

Aunque el reporte consideró que la valuación del euro es apropiada para la zona euro en su conjunto, indicó que el tipo de cambio real del euro estaba entre 10 y 20 por ciento demasiado bajo para los fundamentos de Alemania.

El FMI dijo que la apreciación del dólar en años recientes estuvo basada en un panorama de crecimiento relativamente fuerte y en su política monetaria divergente respecto a la zona euro y a Japón, además de las expectativas de estímulos generadas por las promesas de campaña de Trump.

El organismo recomendó que las autoridades estadounidenses tomen medidas para reducir su déficit de cuenta corriente, que sigue siendo demasiado alto, reduciendo el déficit del presupuesto federal y aplicando reformas estructurales para elevar la tasa de ahorro y mejorar la productividad.

“Es importante resolver el desequilibrio porque si no lo abordan apropiadamente mediante las políticas adecuadas, podríamos sufrir consecuencias indeseadas en la forma de proteccionismo”, dijo en una rueda prensa Luis Cubeddu, jefe de la división de asesoría del FMI.

El reporte añadió que aunque el yuan se encuentra mayormente en línea con los fundamentos del mercado, los modelos del FMI mostraron enormes divergencias con las políticas deseadas, tanto positivas como negativas.

Destacó que el superávit de cuenta corriente de China estaba creciendo de nuevo luego de haber declinado en 2015 y 2016, y que debería ser reducido.